COREA: A 65 años del Armisticio de Paz de 1953 Gustavo Gonzalez Urdaneta
COREA: A 65 años del Armisticio de Paz de 1953
Gustavo Gonzalez Urdaneta
Miami, 30 abril 2018
La península fue gobernada por
el Imperio coreano hasta que fue conquistada y colonizada por Japón después de
la guerra ruso-japonesa y Corea se encontró bajo el dominio japonés durante
casi treinta y cinco años, del 22 de agosto de 1910 al 15 de agosto de 1945,
durante casi toda la primera mitad del siglo XX hasta la rendición japonesa en
la Segunda Guerra Mundial, unos años antes de la Guerra de Corea de 1950.
El 8 de agosto de 1945, la Unión
Soviética rompió el pacto de no agresión que había firmado con Japón en abril
de 1941 y, cumpliendo el acuerdo de la conferencia de Yalta de febrero de 1945,
en el que se comprometía a intervenir en la guerra contra Japón, procedió a la
ocupación de Manchuria, Corea, y las islas de Sajalín y Kuriles. El 10 de
agosto de 1945, el Gobierno estadounidense, que en ese momento no disponía de
tropas desplegadas en la península, ordenó que se delimitasen dos zonas de
ocupación y eligió arbitrariamente una demarcación a lo largo del paralelo 38,
que fue aceptada de inmediato por los soviéticos.
Después de tres años en los que
fracasaron varios proyectos de unificación, el 15 de agosto de 1948 los
estadounidenses crearon la República de Corea en el sur, presidida por Syngman
Rhee, un veterano político exiliado en Hawái y opositor a la ocupación japonesa
de Corea. En respuesta, los soviéticos reconocieron el 9 de septiembre la
República Popular Democrática de Corea, con un Gobierno encabezado por Kim
Il-sung, que había luchado desde 1932 contra los japoneses, quienes lo
consideraban uno de los líderes guerrilleros coreanos más populares y
peligrosos.
Ambos Estados reclamaban la
península entera como territorio propio, lo que los llevaría a la guerra de Corea
el 25 de junio 1950, que finalizó con la firma de un armisticio en 1953. El
Acuerdo de Armisticio de Corea, conocido también como “Paz de Panmunjom”, es un tratado de no agresión actualmente
vigente, firmado por Corea del Norte y la ONU por parte de Estados Unidos el 27
de julio de 1953 que puso fin a las hostilidades realizadas por ambas naciones
y por sus aliados —la Unión Soviética y China por parte de Corea del Norte, y
Corea del Sur y la Organización de las Naciones Unidas por parte de Estados
Unidos. Dicho armisticio fue creado para asegurar el cese total de las
hostilidades y de los actos de fuerza armada en la península de Corea hasta que
se alcance un acuerdo de paz definitivo - pero como nunca se firmó ningún
Tratado de Paz, técnicamente ambas naciones están en guerra desde 1953.
La firma del armisticio de 1953 también estableció la actual zona
desmilitarizada de Corea tomando como referencia el paralelo 38 norte; esta
línea entre ambas naciones sirve como frontera, una de las más fortificadas
militarmente del mundo. En ese punto se encontraron el presidente surcoreano
Moon Jae-in y el líder norcoreano Kim Jong-un, el 27 de abril de 2018 y los
acuerdos de esa cumbre intercoreana pudieran significar un cambio histórico
para la península.
Corea del Norte (CN) fue
dirigida por Kim Il-sung (KIl) desde 1948 hasta su muerte, el 8 de julio de
1994. El 8 de octubre de 1997, su hijo Kim Jong-il fue elegido por la Asamblea
Suprema del Pueblo como Secretario General del Partido del Trabajo y en 1998
como presidente de la Comisión Nacional de Defensa. Tras una reforma de la
Constitución, elaborada en 1972, su cargo fue declarado como «el más alto del
Estado» dejando vacante el de presidente en recuerdo a la memoria de KIl. El 17
de diciembre de 2011, Kim Jong-il falleció mientras realizaba un viaje en tren.
Su hijo, el joven Kim Jong-un, quien fue designado heredero del Gobierno el 28
de septiembre de 2010, asumió las tareas de jefe del Estado.
El pasado 27 de abril se llevó a
cabo la cumbre intercoreana entre el presidente surcoreano Moon Jae-in y el
líder norcoreano Kim Jong-un donde ambos acordaron firmar un tratado de paz
para oficialmente poner fin a la guerra en la península coreana, 65 años
después del cese de las hostilidades. El documento, llamado formalmente
"Declaración de Panmunjom para la Paz, la Prosperidad y la Unificación de
la Península Coreana", fue revelado después de un día lleno de reuniones y
de una conversación privada de 30 minutos entre ambos líderes. "Los dos
líderes declaran solemnemente ante 80 millones de coreanos y ante todo el mundo
que no habrá más guerra en la Península Coreana y que una nueva era de paz ha
comenzado", dice la declaración.
Para tratar de entender
si la postura actual de Kim con Corea del Sur (CS) es sincera conviene darle
una mirada a dos hechos: Que ha hecho
Kim desde que subió a la presidencia en el 2012 y como le ha ido en su
estrategia nuclear. Cuando en el 2011 murió su padre, CN se habia recuperado
considerablemente respecto al inicio de su periodo presidencial en 1994. Esa
recuperación le permitió a Kim señalar que era el fin de las políticas
militares de su padre y prometerle al pueblo que nunca más tendrían que
“apretarse los cinturones”. Con ese fin nombró a un tecnócrata reformista, Pak
Pong Ju, la máxima autoridad de la economía quien descentralizó las decisiones
gerenciales en las granjas y las
fábricas, estableció una docena de “zonas especiales económicas” y dejó por su cuenta
a los extensos mercados informales del país para trabajar su magia. Todas esas
medidas ayudaron a NC a crecer con un modesto 1-2 % anual desde que subió al
poder, a pesar de las estrictas sanciones y la limitada inversión extranjera, y
la capital está floreciendo aunque hay mucha gente en otras partes que aun
languidecen a niveles de subsistencia.
Sin embargo, despreciando estos
esfuerzos, Kim ha focalizado su energía más en lo nuclear que en el desarrollo económico apegándose al
principio de la política internacional que antepone la seguridad a la
prosperidad. Esto nos lleva a concluir que el líder de CN pondrá la economía en
primer lugar y abrirá el país como se requiere sólo y cuando empiece a sentirse
confiado de que ha asegurado su posición
en casa y neutralizado las amenazas externas. Después de seis años parece que
lo ha logrado si revisamos brevemente sus logros en el desarrollo nuclear.
Kim Jong-un ha realizado seis
pruebas nucleares subterráneas hasta ahora y cada una le ha llevado más cerca
de lo que la comunidad internacional ha intentado evitar a través de
conversaciones: un arma atómica en las manos de uno de los estados más
impredecibles.
Después de años de negociaciones
con potencias extranjeras y de cambios de postura, el 9 de octubre de 2006
Pyongyang anunció que había realizado su primera explosión nuclear. Como todas
las otras pruebas que le seguirían, fue subterránea en el noreste del país. Se
cree que este dispositivo estuvo cargado con plutonio y estimaron que la
detonación produjo una descarga de energía de más o menos un kilotón, una
décima parte de la potencia de la bomba que fue lanzada contra Hiroshima en
1945. El 15 de octubre, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó sanciones
militares y económicas contra CN. A finales de ese mes, Pyongyang aceptó
reintegrarse al llamado Diálogo de los Seis para el desarme nuclear, compuesto
por CN, CS, EE.UU., Rusia, China y Japón.
La segunda prueba el 25 de mayo
2009 fue más grande, con un desplazamiento de energía estimado de entre dos y
ocho kilotones. Ambos ensayos fueron interpretados como un intento para
demostrar la capacidad nuclear norcoreana en un momento de transición de poder
entre el líder Kim Jong-il, que había sufrido un derrame cerebral, y su hijo
Kim Jong-un. Una vez más el Consejo de Seguridad aprobó más sanciones contra
Pyongyang incluyendo la autorización para inspeccionar los barcos de carga
norcoreanos sospechados de transportar materiales bélicos.
En la madrugada del 12 de
febrero de 2013, nuevamente se detectó una inusual actividad sísmica alrededor
de Punggye-ri. Pyongyang declaró que había probado un "dispositivo nuclear
miniaturizado y más ligero con más fuerza explosiva que antes". Su tercera
prueba en siete años. La primera indicación de una prueba termonuclear fue el 6
de enero de 2016 con una magnitud de 5,1. Poco después, Corea del Norte anunció
que había realizado su primera prueba exitosa con una bomba de hidrógeno. Su
cuarta prueba.
CN anunció su quinta prueba
nuclear el 9 de septiembre de 2016. Las estimaciones del desplazamiento de
energía en la explosión varían. El ejército de Corea del Sur dijo que fue de
unos 10 kilotones pero otros expertos señalaron que las indicaciones
preliminares sugerían 20 kilotones o más. La bomba que Estados Unidos lanzó
sobre Hiroshima, en 1945, tuvo un desplazamiento de energía de unos 15
kilotones.
El 3 de septiembre de 2017, CN
anunció que lanzó "con éxito" un misil balístico intercontinental. Lo
que tiene a gran parte del mundo sin sueño: CN afirma que realizó pruebas con
éxito de una bomba nuclear miniaturizada que puede ser instalada en un misil de
largo alcance. Su sexta prueba nuclear. Las lecturas sísmicas de 6,3 indicaron
que la prueba fue más grande que cualquier otra realizada anteriormente.
Estimaciones preliminares dicen que las lecturas son de unos 100 a 150
kilotones, potencialmente 10 veces mayores a la última vez. Pasado menos
de un año de dicha prueba por NC, se da el encuentro entre los dos líderes
de la península de Corea el pasado 27 de abril.
Dado el desarrollo nuclear
logrado por NC y la gestión interna lograda por Kim desde el 2011, cabe
preguntarse cuál es la realidad detrás de dicho encuentro. ¿Es que Kim Jong-un
ya se siente confiado de haber asegurado
su posición en casa y neutralizado las amenazas externas y puede firmar,
después de 65 años, un Tratado de Paz y sustituir el armisticio de 1953?
Por un lado, las sanciones
internacionales han sido casi siempre unánime y el Consejo de Seguridad cada
vez formula una nueva resolución con lo cual creo que ya se han impuesto
sanciones contra casi todo lo posible y la situación, en ese sentido, ha
llegado a un punto muerto. Más aun, teniendo presente que China nunca ha
querido aplicar sanciones por el temor de una reunificación de Corea lo cual
pondría fuerzas de USA en sus fronteras, igual que Rusia. No creo que China
tenga ese temor por los momentos. El pueblo de Seúl, que vive bajo una continua
amenaza de un ataque nuclear de NC, debe
ver con muy buenos ojos este Tratado de Paz al igual que Japón. Aparentemente
todos contentos con el resultado publicado del encuentro de ambos líderes
coreanos.
El peligro más grave ha sido
hasta ahora que NC, SC y EE UU tropezaran con una guerra catastrófica que
ninguno de ellos quiere. El mundo ha viajado por este camino peligroso antes.
En 1950, la administración Truman contempló un esfuerzo preventivo para evitar
que la Unión Soviética adquiriera armas nucleares, pero decidió que el
conflicto resultante se asemejaría a la Segunda Guerra Mundial en su alcance y
que la contención y la disuasión eran mejores opciones. En la década de 1960,
la administración Kennedy temió a la inestabilidad mental del líder chino Mao
Zedong y propuso un ataque conjunto contra el naciente programa nuclear chino a
los soviéticos. Moscú rechazó la idea. En última instancia, Estados Unidos se
animó a vivir con la Rusia nuclear y una China nuclear. Obama soñaba con el día
en que “el pueblo coreano, al fin, será uno solo y libre”, desperdiciando los
primeros años del reinado de Kim en el error de creer que el régimen no
sobreviviría mucho después de la muerte de Kim Il-sung, se equivocó por
completo.
Todo lo anterior lo sabe Trump, así que ahora puede aprender a
vivir con una Corea del Norte nuclear y desarrollar una nueva estrategia y ayudar
a Kim a trazar un camino hacia la prosperidad integrando a NC a la economía de
la región. Trump, como hombre de negocios, debería estar abierto a no rechazar un buen arreglo, de ser
posible. Trump puede ahora ayudar a ser de pivote a la economía como lo ha
querido siempre Kim. Esto permitiría a Trump reafirmar el liderazgo de USA en
una región crítica a sus intereses y finalmente empezar a resolver un problema
que ha acosado a todos los presidentes de EE UU desde Harry Truman. Amanecerá y
veremos.
Muy interesante
ReplyDeleteOjala tenga exito este intento.
En la epoca de Bush jr. el presidente de SC emprendio un camino hacia la reunificacion q le valio el Premio Nobel de la Paz. Tal proceso fue saboteado por USA.
En la Guerra de Corea McArthur desembarco en Inchon, arriba del paralelo 38 y se enfento a soldados chinos.
Tal aventura no fue aprobada por Truman quien removio a McArthur.
Vale la pena acotar q el 12/5 proximo se renova o cancela el acuerdo con Iran q impide q este pais adquiera armamento nuclear.
Muy coincidencialmente Netanhayu encontro un arsenal de documentos q "demuestran" q Iran ha mentido y tiene bases secretas donde continua su desarrollo nuclear.
Es ingenuo pensar q podria haber limitacion nuclear mientras 8 naciones posean esta capacidad. Por cualquier intersicio una nacion con suficiente tecnologia y recursos q se sienta amenazada trataria de emprender ese camino, sobre todo despues del ejemplo de Irak.
Y mas temprano q tarde aparecera el tema de Taiwan, q China tiene en su agenda y q USA tiene como fortaleza en su perimetro de influencia.
El afan de dominio y control, tal vez fruto de impulsos tribales y miedo al Otro, continua presente.
Está claro que la reunión Kim-Moon no se hubiera dado sin la contribución del trio Kim-Moon-Trump. La decisión de Kim de involucrarse fue básica independientemente de las razones detrás esa decisión. Igualmente crítica fue la disposición de Moon a servir de intermediador entre Pyongyang y Washington asi como la continua presión de Trump sobre Kim.
ReplyDeleteNo cabe duda que la reunión de Kim-Moon en Panmunjom es una nueva oportunidad histórica pero apenas se inicia una carrera larga y con muchos obstáculos para lograr una paz duradera. Aunque todos entienden la desnuclearización como el desmantelamiento completo, verificable e irreversible de las armas nucleares, seguramente difieren en la secuencia.
Los detalles de la desnuclearización requerirán un compromiso entre el acuerdo integral preferido por Seúl y Washington y el enfoque incremental y sincronizado de Pyongyang. Es probable que Trump tenga que idear una forma más realista, flexible y creativa de manejar a Corea del Norte para poder avanzar de lo contrario los llevaría a otra ronda de crisis y tal vez a acciones militares y algo más.
Un logro complementario de la cumbre es que sentó las bases para la reunión de Trump-Kim que se supone que tendrá lugar a fines de mayo, asi que por ahora el balón está en la cancha de Washington.
Gustavo Gonzalez Urdaneta
Si Nor-Corea no esta completamente segura de que no seria atacada, no aceptara la desnuclearizacion.
ReplyDeleteEl caso de Irak con sus armas de destruccion masiva, que jamas fueron encontradas, es un
ejemplo muy cercano.
Y al dia de hoy, la insistencia de Trump en no convalidar el acuerdo con Iran y el teatral acto de Netanhayu, que coincidencialmente encontro toneladas de archivos ocultos que probarian que Iran mintio y continua o continuara su programa nuclear, es otro elemento en consideracion.
Cualquier nacion, con suficiente tecnologia y recursos, que se sienta amenazada, podria recurrir
a un programa de nuclearizacion.
Sin contar la terrible amenaza de terroristas con acceso a estas armas.
Cuando hay ocho naciones con armamento nuclear, es posible pedir a otras naciones que no tomen ese camino ?
El genio salio de la botella.
Mario Caires
2/5/18