Esquina de Jesuitas, Villa Loyola y el Servicio Militar Crónica del Chat San Ignacio’61(II) Gustavo Gonzalez Urdaneta (Editor)
Esquina de Jesuitas, Villa Loyola y el Servicio
Militar
Gustavo Gonzalez Urdaneta (Editor)
De acuerdo con
el Edasi nos graduamos setenta y seis entre Ciencias y Humanidades en 1961. De
esos setenta y seis, cuantos empezaron en primer grado en Jesuitas y cuantos en
segundo grado en Villa Loyola (VL) es un ejercicio que empecé con Jose Pedro
(JP) desde el 2016 y han contribuido una gran mayoría a medida que se ha ido
completando la base de datos con los correos y celulares.
El objetivo de
estas Crónicas es, como se suele decir al tratar un tema personal, abrir una
ventana de comunicación de las experiencias del grupo, con relación a los años
compartidos en nuestra educación primaria y secundaria, y la amistad
consolidada en nuestros corazones en los 58 años de graduados.
Nuestra
intención, al ponerlas por escrito, es revivir un poquito de cada etapa a
través de anécdotas de esas experiencias compartidas. La idea original es ser
amplios e incluir las dificultades y los buenos ratos, aunque las primeras
puedan haberse esfumado con el tiempo y, tal vez, en la memoria solo quedaron
grabados los segundos. Tal vez queramos transmitir nuestros recuerdos a los
hijos y nietos y evitar, lo que suele suceder, que la emoción de los buenos
recuerdos se destiñe con el tiempo. Nuestros hijos y nietos le dan color a
nuestras vidas. Una manera de ser y hacer diferentes. Perdone si son largas
pero el contenido es de ustedes.
Un poco de todo
eso trata la presente crónica. Para refrescar la memoria, empecemos recordando
el origen de ambos grupos. El colegio San Ignacio fue fundado el 8 de enero del
año 1923 por el padre Luis Zumbalabe, quien también fue su primer rector. Su
primera sede estuvo ubicada en la esquina de Mijares, en los edificios donde
funcionaron el Hotel Caracas y el Hotel París. Para ese entonces la población
estudiantil era de 120 alumnos. En 1924 se extendió hasta la esquina de
Jesuitas, ocupando la casa del presidente Andueza Palacios.
Allí, en
Jesuitas empiezan sus estudios de primaria en 1950 una parte de esos setenta y
seis. En1951 se funda VL bajo la dirección del Hermano Francisco Javier Bonet y
se incorporan las Hermanas Esclavas de Cristo Rey al equipo profesoral del
Colegio en VL. Allí empezamos otra parte de los setenta y seis nuestro segundo
grado.
VL empieza en el
año lectivo septiembre 1951- julio 1952 con los siguientes cursos: Segundo grado
A donde estaban JP, el suscrito y otros con la Madre Múzquiz, el segundo grado
B donde estaba Oscar Garcia Senis y otros con la Madre Berrospe; el primer grado
A, donde estaba José Rosendo (qepd), hermano de JP y Rafael T. Caldera, entre
otros con la Madre Pérez; el primer grado B donde estaban los Urdaneta
Fuenmayor -Alberto (qepd) y Alejo- y otros con la Madre Lecumberri;
Preparatoria, donde estaba Isaías, hermano de JP y otros con la Madre Galar
Superiora de las Esclavas de Cristo Rey y Kindergarten donde estaba Juan José
Caldera, Freddy Alcántara, primo de JP y otros con la Madre Oroz. Todas las
maestras bajo la batuta del recordado Hno. Bonet y con la ayuda de una joven
hermana de alumnos y exalumnos jesuitas: Mariette Vera Morchain, hermana de
Gastón, exalumno ya, y Jacques Vera alumno de 5 de Biología. hijos del Dr. Rafael
Vera que era el médico de los jesuitas. Todo esto me lo contó JP en el 2016
cuando empezamos a reconstruir al grupo de Fundadores de VL.
Paralelamente en
la esquina de Jesuitas siguió funcionando un segundo grado único, con todos los
que no se fueron a Villa Loyola: Angel Ignacio, Néstor González (qepd), Daniel
Fonseca, Juan Garrido, Roberto Kazibuwtoski, entra Pablito Hernandez. etc. Y
siguió funcionando ese curso 1951 y 1952-53. Entre los años 1953 y 1954 el
colegio se traslada a su sede actual en Chacao y pasa a llamarse Colegio San
Ignacio Chacao. El primer rector del colegio, en su nueva sede, fue el padre
José María Salaverria y para esa época contaba con 1.425 alumnos. Al rector
Salaverria (1951-1956) le siguieron el Padre Jenaro Aguirre (1956-1960) y al
final el Padre Angel Damboriena (1960-1962). Nuestro último Rector y, tal vez,
culpable del episodio de la fiesta en la anterior crónica.
La mudanza se
debió a que, en el año lectivo 1953-54, en lo que era el Colegio en Jesuitas
pasó a ser UCAB, salvo un quinto año que quedó allá y era el Colegio San
Ignacio Caracas y era mixto. Este Colegio dura, según me contó JP, hasta
1961-62 estando él ya en la UCAB en 1er año. De hecho, mi hermano, Rafael
Ernesto “Gonzalito”, se gradúa allí de bachiller en Biología (1958) pues aún no
se había establecido Ciencias y Humanidades sino Biología, Física y Matemáticas
y Filosofía y Letras.
Esta crónica se
inicia por una pregunta que le hace Angel Ignacio (AIg) a JP de si recordaba quienes
fueron “Seniors” en nuestra promoción y le citaba que él se acordaba de Gustavo
Roosen y le comentaba que en el Edasi de nuestra graduación se podía buscar,
pero su ejemplar estaba en Caracas. Ya les envié a ambos las fotos de quinto de
Ciencias y Humanidades para ver si nos ayudan a cuantificar los Seniors
(Jesuitas) y los Decanos (VL).
En anteriores
oportunidades, hablando con AIg, me mencionó la existencia del Diploma de “Senior”
del Colegio San Ignacio para todos aquellos que hubieran estado desde primer
grado hasta quinto año de bachillerato en el colegio. Por él fue que me recordé
de esa “distinción ignaciana”. De hecho, recién nos pasó una copia de la suya
por el chat.
No tardó diez
minutos JP, con esa memoria prodigiosa que tiene, en proporcionarle una primera
lista, que creo no es de Seniors sino de primer grado en Jesuitas, en la cual
incluía a Lorenzo Fernández, al tocayo Perez Olivares, los tres Terifes, Johnny
Boccardo, Daniel Fonseca, los Reyna – Gustavo y Luis Ignacio -, Juan Garrido,
Nelson Socorro, Constantino Zabala y a Roberto Kazibutowski (RK), a quien le
mando un SOS al respecto. Mencionó también a Alatz Berecibar, Escorihuela, Jon
Urbiztazu, Elguezabal, Martinez Nadales, Alfonso Zavarce y Olive, pero aclaraba
que algunos no eran Seniors, pues no habían terminado, y citaba, entre ellos, a
Berecibar, Urbiztazu, Eleguezabal y a Fonseca que falleció en 1956 y, de los
demás, le pedía confirmación a RK. Después dijo que de los Terifes no creía,
pero no se acordaba.
A esta altura de
la crónica, puedo confirmar que no conocí a varios de los nombrados, pero tengo
la impresión de que, de esos, deben ser Seniors, Pérez Olivares, los dos Reyna,
Juan, Nelson y RK, además de JP y AIg. Los Terife, Santiago y Félix, no se
graduaron con nosotros ni fueron Seniors y el otro Terife que recuerdo, José
Antonio, sí fue Senior, debió ser de 1959. Recuerdo a dos Zavarce, Reynaldo
(1960) y creo que Alfonso, pero no estoy seguro si éste se graduó en el
colegio. “Tancho” Zabala nos aclara más adelante su caso.
AIg menciona
después a Klein y a Luis Felipe quienes creo empezaron en segundo y tercer
grado en Jesuitas y Villa Loyola, respectivamente y no está seguro si Lorenzo
Fernandez empezó en primer grado. Yo lo recuerdo de segundo grado. Espero que
las fotos de Edasi de nuestra graduación puedan ayudar a aclararlo todo. Uno
que no nombran es a Roberto Augusto Martin (RA), quien creo es Senior. Luis
Felipe informó que empezó en tercer grado con la madre Berrospe en Villa
Loyola.
Al fin RK
responde al SOS de JP, pero esta confundido pues afirma que “el Diploma Senior
era por haber cursado los doce años ininterrumpidos en el colegio”, pero la
copia que después nos mandó AIg de su diploma es muy clara en que se trata de
los que cursaron desde “primer grado hasta el termino de bachillerato”. La
confusión de RK, tal vez, se debe a que él comenzó en kínder y primer grado en
la esquina de Jesuitas, es decir, estuvo doce años. pero no paso por VL pues
pasó directo a un grado superior que, no estaba seguro, pero debió ser cuarto
grado pues en Villa Loyola estuvimos hasta el tercer grado.
JP le confirma a
RK que su grupo fue a cuarto grado con el Hermano Tobía, el suyo (en el cual
estaba yo) con el Hermano Petit y el grupo de RA con el Hermano Igoa en el año
1953-1954. Y que eso si lo tenía claro pero no otras cosas por culpa del alma…
RK alabó la memoria de JP y que se recordaba del Hermano Tobía. A todas estas,
AIg no se recuerda que en Jesuitas existiera kínder y ratifica que el Senior
era desde primer grado hasta quinto año ininterrumpidos, por once años. RK le
ratifica que si hubo preescolar en Jesuitas que luego siguió en VL y que era
cierto que el diploma de Senior era por once años. En ese momento AIg nos envió
la copia de su diploma de Senior. Menos mal, que al menos eso ya se aclaró,
pero aún no sabemos cuántos Seniors de Jesuitas hubo en nuestra promoción ni
cuantos Decanos de VL. Paciencia, ya llegará. De hecho, nosotros fuimos la
primera promoción de bachilleres fundadores de VL, pero no todos estuvieron en
VL.
Los graduados en 1961 en el San Ignacio de Loyola en
Chacao, Caracas, (SIg’61) es un grupo profesional muy sui generis,
residenciados en su mayoría en Caracas, Venezuela, pero incluye destinos tan
lejanos como Canadá, Australia y Europa, principalmente España y un núcleo
pequeño en Miami, USA, que fue el promotor del chat San Ignacio’61 en WhatsApp
y creó la base de datos de todo el grupo.
Cumpliendo con los objetivos de los Jesuitas, fuimos
educados cristianamente humanistas con una sólida instrucción científica y
literaria con los consabidos estímulos de la religión católica, de la emulación
y del deber. En una mirada retrospectiva, se puede afirmar que los propósitos y
estilos de la educación jesuita, han dejado un sello que ha definido toda
nuestra personalidad. Cada uno, a su manera, ha incorporado la herencia
recibida a su vida, la ha interpretado, recreado y transferido a sus
descendientes. Esta educación católica guió nuestra vida. En todo, Amar y
Servir, el lema del colegio.
Continuando con la relación de curso-maestro en
primaria, AIg informó que él había estado con Tobia, Pepe y Andueza; JP y yo
estuvimos con Petit, Tobia y Lanz (Bolita) de cuarto a sexto grado. Recuerdo
que en bachillerato tuve al Hermano Velilla durante 2-3 años, pero no preciso
cuales fueron, pero me inclino por los primeros pues los últimos dos ya nos
reagruparon en Ciencias y Humanidades.
Apareció Armando Enrique Cubillan (AE) que no recordaba
que en la esquina de Jesuitas hubiera un Pre Primer Grado e informaba que él
había entrado en primer grado en Jesuitas un año antes que nuestro grupo y se
había emparejado en tercer año porque perdió el primer año y tuvo que repetirlo,
así que cursó primero y segundo año en el San José de Mérida. Y cuarto grado
con Igoa en Jesuitas, quinto con Pepe y sexto con Andueza. Yo no sabía que Igoa
estuvo en Jesuitas. AE no recordaba quienes eran sus maestrillos en primero,
tercero, cuarto ni quinto año. Nos decía AE que el Padre Rubio lo raspó en
Castellano y Literatura y por eso perdió el primer año. Muchos años más tarde
lo vió regentando una cátedra en la Universidad de Duesto en San Sebastián en Psicología,
pero no sabía si era el director de dicha escuela.
Si lo de AE los agarró fuera de base, esperen a oír lo
de Tancho. Resulta que él empezó en
primer grado en Jesuitas, luego siguió hasta el segundo año de bachillerato con
el grupo del ’61 y después viajó a EE. UU. y Europa por dos años. Estudió en el
Loyola School en New York y volvió al SIg para tercero, cuarto y quinto año con
los compañeros del ’63 pero si le dieron diploma Senior por haber estudiado de
primer grado hasta quinto año de bachillerato. ¿No eran 11 ininterrumpidos?
Parece que las reglas cambiaron o eran así desde el principio.
Por lo visto fue Tancho, a esta altura del chat, quien
introdujo el tema del servicio militar en el mismo. Se excusaba de que su
memoria hoy en día no está tan buena y quería compartir con sus compañeros lo que
fue el servicio militar que hicimos. Recuerda que fue Pérez Jiménez quien quiso
introducir el servicio militar en los colegios y se hizo una prueba con el San
Ignacio. No estaba seguro si cursaba sexto grado o primer año, cuando íbamos
los sábados a la Escuela Militar y nos daban armas que recuerda “eran carabinas
FN30 belgas”. Y bayonetas. Le parece recordar que teníamos uniformes verdes y
uniformes de kaki o marrones para los desfiles y que nos daban todo tipo de
instrucción. Tiene recuerdos de que desfilamos ante Pérez Jiménez en Los
Próceres con carabina y teníamos que ir con paso de ganso enfrente de la
tribuna presidencial. No recuerda con claridad, pero piensa que tuvimos una
“experiencia rara” respecto a otros colegios. Muy cierto.
El primero en responder fue el amigo RK quien nos
decía que él, en ese desfile de Los Próceres el 5 de julio, participó con la
Banda de Guerra del SIg con trompeta heráldica y que los sábados teníamos las
prácticas con carabinas como parte del entrenamiento. Recuerda que en una
oportunidad el mismo Pérez Jiménez con Suárez Flamerich estuvieron en la
tribuna del colegio con motivo de otro desfile.
Les comenté que hicimos prácticas tanto en el colegio
como en la Escuela Militar y nos iban ascendiendo en grado militar y creo que
llegué a Alférez. Se suponía que ese convenio, no sé si hubo con otros
colegios, era para liberarnos del servicio militar, pero siendo estudiantes estábamos
exceptos así que debió haber otras razones que no recuerdo o nunca supe. Les
pregunté que, si eso había sido una experiencia con el SIg, ¿Por qué? y si
alguien sabia algo al respecto. Recuerdo que había varios compañeros cuyos padres
eran perezjimenistas, aunque no creo llegaron hasta el ’61.
Otra vez participo RK para informar que, si mal no
recordaba, “era solo un ensayo para probar la excepción del servicio militar, y
que el por qué escogieron al SIg, creía que era para privilegiar de esa
excepción a muchos hijos de políticos y militares que estudiaban en el
colegio”. Si bien le contesté que me parecía una buena razón, no creo que MPJ
haya hecho eso por condescendencia con algunos de sus seguidores. AE precisó que nos dieron uniformes kaki, correa y zapatos y el coronel al mando de la
instrucción militar era de apellido Briceño; recuerda que gritaba por el
micrófono: ¡La banda corre!, banda que era del ejército y corría según eran sus
deseos. Mas tarde LF le recordó que se le olvidó la cristina de kaki, JP dijo
que los zapatos eran marrones con tacón de suela que sonaban muy duro y Rivero
que eran marca Pepito.
Apareció Pablito Hernandez que se recordaba que en
primer año a los de la banda les tocó el 3 de julio con el Ministerio de
Relaciones Interiores, el 4 de julio con los colegios y el 5 con los militares
y el 6 de julio presentaban el final de Biología con Olave. JP le contestó a
Pablito que no se acordaba de los tres desfiles; uno en los Próceres como
militares y dos en la avenida Urdaneta. Y que era cierto, después final
escrito-oral y práctico de biología. En eso Eduardo Rivero comentó que había un
Capitán Galíndez que años después llegó a General. JP se acuerda del tal
Galíndez que cree tenía unas patillotas y era muy simpático. Y AIg diciendo que
recordaba a un capitán Parra de pequeña estatura, sin más comentarios. Lo que
si recuerdo es que nunca nos dieron ninguna Constancia de Excepción y creo que
después no hizo falta. Debió haber otra razón.
Regresando al tema anterior de los Seniors, aparece Cubillán
reclamando que debiera tener el Diploma Senior pues cursó primero y segundo
grado en Jesuitas, el tercer grado en Areneros de los Jesuitas en Madrid, del
cuarto grado al primer año en San Ignacio Chacao, primero y segundo año en el
San José de Mérida y de tercero a quinto año en el SIg Chacao. ¡Y mi Senior qué! Tiene razón pues ya vimos
con Tancho que no tienen que ser ininterrumpidos. Reclámalo AE y cuenta con mi apoyo.
Volviendo al tema militar, el matemático del grupo,
Delfin Moronta, manifestó que desfilamos durante la semana de la patria por dos
años consecutivos los días 4 de julio con los colegios y los 5 de julio con el ejército
y que los del liceo Jáuregui, que partían antes que nosotros, les molestaba que
usáramos bayoneta calada y ellos no. Comentó que el segundo año, que las cosas
estaban mal para el régimen, a todas las carabinas les retiraron el cerrojo,
inutilizándolas para el disparo. A este respecto Luis Felipe comentó que el
loco de Joaquín Chaffardet amenazó al Prefecto Arruza con la bayoneta calada
por un peo que tuvieron en una práctica de desfile y que los curas tenían
firmados todos los diplomas por la participación de los desfiles, pero cuando
cayó Perez Jiménez los escondieron y, luego, los volvió a ver en una vitrina
por la administración. Mas adelante Jose Antonio Troconis ratificaba que Chaffardet
apuntó a Arruza con el fusil y a éste de vaina no le dió un infarto y que a
partir de allí le quitaron los cerrojos a las carabinas. En el fondo se oyó un
grito de Rivero ¡Que no se llamaba CERROJO! y para decir que el gordo Hans
Vogel (qepd) era el sargento mayor y él era cabo de segunda
El Troco nos recordaba que en sexto grado desfilamos
con la carabina colgada en la espalda pues eran muy pesadas para nosotros y ya
en primer año la llevábamos al hombro. Él no desfiló con carabina pues estaba
en la banda. Igual cuenta JP que el desfiló con carabina el primer año y en el
segundo no porque estaba en la banda de guerra y había salido ganando pues la
heráldica pesaba menos que la carabina.
JP nos aclara que lo del servicio militar fue fallido
pues no nos dieron ninguna constancia y que fueron dos años, en sexto grado
(1956) y primer año (1957). En la Escuela Militar, el primer año su instructor
era el Alférez Pedro Amaral que llegó a General, en cambio en el segundo año el
instructor fue el Alférez Muñoz Cabrera de la EFOFAC. Que tuvieron el
privilegio de tener como comandante al coronel Jesus Adolfo Medina Sanchez (la
banda se para, la banda corre), oficial de altísimo prestigio profesional,
luego comandante del batallón Bolívar, el principal de la guarnición de
Caracas, leal al General MPJ hasta el final y que luego del 23 de enero no lo
pudieron botar del ejercito dado su prestigio. No recuerdo si había varios
comandantes.
Nos contaba JP que todo lo anterior lo sabía porque su
papá fue médico militar asociado y trabajó a tiempo convencional desde 1939 a
1969; entro como capitán asimilado y terminó como coronel. Trató a todos los
presidentes, incluso a Rómulo con las manos quemadas y conocía a un montón de
oficiales de todas las fuerzas por su trabajo de médico y laboratorista y era
amigo de nuestro comandante Medina Sánchez. Luego de la caída de MPJ nuestro
servicio militar no prosperó porque era un plan de MPJ.
En relación con nuestra Banda de Guerra, opina JP que,
modestia aparte, era muy buena con su uniforme azul rey era espectacular y,
solo rivalizaba -para variar- con las dos de La Salle, Centro y Colina. A él le
daba mucha envidia las enormes trompetas de tres pistones profesionales de
orquesta. Un día llamó a Equipo del Musico preguntando por el precio y era
carísima. Para la época Bs 800 y quien atendía era el papa de Victor Cedeno que
estaba casado con una hija del dueño del negocio, Victor Álvarez. Enseguida
aclaró RK que nuestras cornetas tenían un solo pistón y lo demás era a fuerza
de pulmón, sobre todo para las notas agudas. Recuerda que cuando tocaban “La
Marcha Aida” se lucían. Según JP las de ahora tienen tres pistones y puedes
tocar, si te acuerdas, hasta “La Múcura”.
Se ha comprobado una vez más que el tiempo debe ser
medido no solo en extensión sino en intensidad. Hay un tiempo extensivo y otro
intensivo, que fue una tesis de Henri Bergson. Si es así debemos decir que
pocas veces en nuestra vida hemos vivido el tiempo con tanta intensidad como en
el lapso de cuatro años transcurridos desde la creación del chat y la base de
datos.
Les mencionaba que un recuerdo de VL a comentar son
las verbenas que todos disfrutamos bajo varias perspectivas y, seguro, hay
mucho que contar. El amigo RK comentó inmediatamente que a las verbenas
asistían alumnos de otros colegios, familiares, etc., y que tenían muy buena
fama ganada poco a poco por la buena organización. Recuerdo que al principio
eran reuniones familiares en el sentido que la comida de los kioscos era provista
por las mamás e iban todas las familias y amigos. JP mencionó que su mamá, por
muchos años, con otras señoras entre las que recuerda a Leonor Mendoza, mamá de
su concuñado el gordito Francisco, tuvo la rifa de los animalitos. Tenía la
colaboración de Protinal y algunos de sus clientes.
Regresamos al tema del servicio militar y Roberto
Augusto (RA) recordaba que un coronel del ejército (antiguo "forjador de
libertades") quien era muy cercano a MEPJ y tenía amistad con su Viejo, ya
que todos los sábados lo llamaba para pedirle
datos para el 5 y 6 (en el hipódromo de El Paraíso , se sellaba sábados
hasta medianoche), le comentó a su papá que el colegio SIg era un plan
piloto porque la idea de MEPJ era dar
instrucción militar a los colegios
católicos (de curas) para tener una población preparada militarmente y así
evitar entrara el comunismo a nuestro país, esa era realmente la idea, el
propósito de todo ese proyecto.....se cayó con la caída del gobierno
sencillamente.....Solo estaba enfocado a colegios católicos para ese entonces,
así la población joven cristiana estaría en capacidad de detener ese cáncer.
Esta es una razón lógica y convincente del porque seleccionaron al colegio.
Dado que esta conversa partió de la pregunta de AIg a
JP sobre los Seniors, JP le comenta a RA que le parecía que él debía serlo
también, aunque ellos se habían conocido antes en el kínder de la entonces Sra.
Estrada, junto con los Morales, su hermano Julián, Jose Rosendo, el cojo
Parilli, Eduardo Suárez, etc. Por conversaciones posteriores entre Suárez y
Gilberto, entiendo que la maestra era la tía Mercedes de Eduardo. Eso lo citó
más tarde RA, aunque con cierta duda, pues ni por el carajo tenía la
privilegiada memoria de JP. RA le contesta a JP, que sí, que él había ido de la
esquina de Jesuitas a Chacao comenzando con Joaquín Igoa, nunca fue a VL, pero
quien si fue era su hermano Julián y que recordaba que había tenido una maestra
vasca llamada Carmela, que había monjitas de maestras y si mal no recordaba, el
Hno. Bonet era el encargado de VL. JP le pidió excusas por su omisión como
Senior. Al final vamos a saber claramente cuantos Seniors se graduaron en 1961
y cuantos fundamos VL. Como le dijo RA, ¡Karaaaaachaaaa! JP, que memoria tan
arrecha tienes de verdad.
Comentaba RA que, hablando en una oportunidad con
Gilberto Morales, la amistad de ellos y otros más databa de 1947.JP recuerda
que la maestra de ellos en primer grado en el curso 1950-51 era la Srta. María
Esther Campos quien además les había enseñado a rezar el rosario. A ella se la
consiguió muchísimos años después como pensionista en la Mansión del Sagrado
Corazón en la parte alta de La Castellana. Por allí por 1983 iba a la Mansión a
visitar su tía Carmen, hermana de su papá y aprovechaba verla. Una vez falleció
su tía le perdió la pista.
Troconis nos comentaba una anécdota que le había
pasado, hace mucho tiempo, en un matrimonio conversando con un grupo de amigos;
uno le preguntó: ¿Tú no eres Troconis Berti Jose Antonio, Nº32 con la madre
Berrospe en segundo grado B en VL? Eso lo tomó por sorpresa y su interlocutor
le pregunta ¿A que no sabes quién soy yo? La verdad es que Troconis no tenía ni
la mejor idea y le contestaron: Yo soy el “Gordo Flores” que estudié contigo
segundo y tercer grado. Que prodigio de memoria, supo que era médico y, no
sabía por qué, pero, creía que era pariente de Miguel Calvo. Troconis nos
pregunta si alguno se acuerda de él y del “flaco Guerra” que media como 1.90.
JP le pregunta si él no tocaba el cornetín de llamada en la banda, que era
arrecho de tocar. Creo que lo decía con conocimiento de causa. Respecto al
gordo Flores, JP nos comenta que era medico obstetra y tenía el consultorio en
la clínica La Floresta y que lamentablemente ya falleció. Complementaba que en
esa clínica está el consultorio de Carlos Gámez Arévalo quien por cierto es
Senior también. Troconis supo que Guerra había pasado a La Salle de Caracas
cuando pasamos a sexto grado y creía que allí se graduó.
Les comentaba que a Carlos Gámez Arévalo, el gran
“Pirulo”, me lo encontré en un matrimonio por allá en el 2010 y que me había
conseguido una cita con un neurocirujano de la Floresta para tener una segunda
opinión sobre si me operaba de dos hernias discal cervicales que tenía y me
operé, pero ese es otro cuento. Resulta que hablando con Pirulo me entero de
que se había casado con una de las dos únicas niñas lindas que teníamos en
ingeniería, la otra casó con un compañero de eléctrica, como debía ser. A
Troconis le llamó la atención que hablara en plural al referirme a bonitas en
ingeniería, pero, la verdad, bonitas dos, otras eran agraciadas. Parece, según
el Troco, que Gámez Arévalo se arrechaba cuando le decían “ven acá Gámez”.
Recién lo vi en unas fotos y, salvo los años, está igualito a como lo recuerdo.
En cuanto al flaco Guerra, RA se recuerda que su
esposa era una dirigente copeyana y AIg completa que, con Germán Guerra, tenía
una gran amistad, compartieron varios años de estudios y parrandas, él dejó los
estudios de medicina y lo veía ocasionalmente en los restaurantes. Él se graduó,
creo, en Economía y se dedicó a la política con Copei. Su padre, el Dr. Guerra
Mass, excelente traumatólogo ortopedista.
Troconis vuelve al tema de las compañeras de
ingeniería para decirnos que, en la UCAB, en su época, habría como mucho, dos o
tres bonitas, las demás eran agraciadas. Que la más bonita, y por mucho, era
Beatriz Viney quien fue esposa de Ramon Pimentel Hardy. Les comenté que Ramon
no está bien de salud y que he sabido de él por su primo y amigo Adrián Hardy.
JP pasa a tocar varios temas. Confirma que fue corneta
de órdenes de la banda sustituyendo a Jorge Baiz (qepd) y que no nos imaginamos
la mamadera de gallo cuando, y era frecuente, se le iba un gallo. Escribiendo
sobre los Loretos, nos cuenta que su papá, el Dr. Luis Loreto Hernández, es el
padre del Derecho Procesal Civil moderno en Venezuela y uno de los padres de la
misma disciplina en el ámbito iberoamericano. Su tesis de gado presentada en
Alemania en 1952 o 1953, está considerada dentro de las diez mejores
monografías sobre procesal civil en lengua castellana. Ese comentario me llevó
a preguntar por el paradero de los Loretos, quienes nos acompañaron varios
años, pero no terminaron con el grupo ni creo que en el colegio.
JP solía saber de ellos hace algunos años por una
hermana menor que iba a misa en Don Bosco en Altamira, pero tiene tiempo sin
verla. En otra época se veían más porque tiene un hijo de la misma edad que
Pepe, el suyo, y estudiaban en el mismo colegio y había piñatas y
bimbolandia…Apareció Javier Jaso para informarnos que los Loretos fueron muy
amigos suyos, especialmente Guillermo, médico gastroenterólogo, asimilado por
la Marina. Cuenta que eran un bojote de hermanos, un arquitecto, uno o dos
abogados; lamentablemente una de las hermanas la atendieron en la clínica Ávila
por una cardiomiopatía viral enfermedad sumamente grave de la que no se
recuperó. Guillermo vivía por el Club Hípico, la última vez que habló con
Guillermo fue hace como 4 años, aún estaba él en Margarita. A Loreto padre lo frecuentó
bastante, ellos vivían por la avenida Casanova y allí conoció a Rafael Caldera
que era muy amigo del papá. Excelente familia. Recuerdo a los Loreto pues en
una época coincidí con ellos en el Bus #1 que recorría el Este y había varios
entre Bello Monte y El Rosal. A raíz del comentario de Javier, AIg le pregunta
si se recordaba donde trabajó Loreto como Oficial de la Armada.
Al principio pensé que tal vez el tema del servicio
militar no levantaría mucha curiosidad y que no habría suficiente material,
pero me equivoqué por completo. Sobre ese tema vuelve Rivero para recordarnos que
otro que nos daba instrucción militar era un alférez que se llamaba John
Richard de Bellard Pietri quien años después se ahogó en un vehículo anfibio en
el lago de Valencia. Lo complementa JP informando que De Bellard era el marido
de María Margarita Lara Peña graduada en la UCAB un par de años antes que él y
solían verse con cierta frecuencia.
Reaparece Javier para contestarle a AIg que lo único
que sabía de Loreto es que era de la Marina y trabajaba en un hospital de esa
fuerza en la Guaira, cree que ya está jubilado. AIg le precisa a Javier que su
pregunta era porque él es oficial retirado de la Armada y trabajó en el
hospital Naval de Catia la Mar por un año y nueve años en el hospital militar
de Caracas y nunca lo vió pero que era posible que lo asimilaran en otra época
diferente a la suya. Nos comenta AE que al arquitecto Luis Loreto lo ve con
frecuencia en misa de 1:00 PM en la iglesia de La Tahona los domingos y que una
de sus hermanas se casó con Blas Delascio, abogado que trabajó muchos años en
el banco La Guaira y era o es director de la empresa propietaria del hotel
Tamanaco por los Abilau.
Raul Aldrey, quien fue nuestro compañero y participa
en el chat, nos comentaba que Bernardo Loreto, de profesión abogado, está
casado con Lucía Roosen, hermana de Maita, su esposa, y de Gustavo nuestro
compañero y Senior.
RA recuerda que una vez entrando al CAN (Catia la Mar)
que iba a consulta con Cortina Briceño se saludó con AIg, él iba de civil
mientras que Angel iba con su uniforme de Almirante y eso seria, si la memoria
no le falla, entre 1972 y 1973. Según Angel debió ser entre 1974 y 1975 pues él
estaba en los años anteriores en Londres con el “Tigre de Carayaca”, suegro de
RA. JP le informa a AE que Mary Loreto trabajó con él en el BHVP y confirma, lo
que les había mencionado, que Ramón Pimentel (RP) no está bien de salud y que
hace años se divorció de Beatriz Viney. Nos cuenta que tiene enormes problemas
de motilidad en las piernas y no sabe si ya pasó a la silla de ruedas. Mientras
su hijo estuvo en Venezuela, se ocupó de la parte de los impuestos de RP y de
sus empresas como cliente de Baker McKenzie. Hace ya unos cuantos años tuve en
contacto con RP por un proyecto de un economizador de gasolina con unos amigos
y en esa época aun podía alternar en las reuniones con el grupo.
Apareció el compañero Eduardo Suárez para sumarse a la
conversa sobre el servicio militar y expresar que la banda de guerra del San
Ignacio fue la mejor y más disciplinada de Caracas, con el Hermano Tobía como
director y que las prácticas eran dos días a la semana, en uniforme kaki y era
muy exigente. Él era corneta, era esquinero y tocaba una heráldica, alineados a
los lados y de frente sin voltear la cabeza, con perfección. Menciona que
Pietri era el tambor mayor, algo que no recuerdo. Recordaba Eduardo cuando la
dictadura nos pasaba buscando en autobuses militares los sábados por la mañana,
los de sexto grado con carabina al hombro y bayoneta en el lado izquierdo de la
cintura, el arma iba con su cerrojo o acción, los de bachillerato iban con
bayoneta calada, desfilamos en los Próceres los 5 de julio con los otros
colegios, era una gran idea. Luis Felipe dijo que tocaba el bombo y Rafael
Matos, el platillo.
Angel Ignacio recuerda que el único colegio que desfilaba
el 5 de Julio en Los Próceres con todos los componentes militares, era el
Colegio San Ignacio. La fecha del desfile de los Colegios se realizaba unos
días antes, en la avenida Urdaneta. La gran rivalidad de bandas que, en esa época,
era entre la nuestra - que era una banda de guerra - y la del Colegio Salesiano
que era una banda marcial, excelente, dicho sea de paso.
Troconis nos
cuenta que a Luis Loreto, el arquitecto, lo veía de vez en cuando en misa de la
Iglesia de la Caridad del Cobre, Santa Paula, la última vez que lo vió le habló
de este grupo y quedaron en contactarse para que le pasara sus datos y
agregarlo, pero no volvieron a verse pues él dejó de ir a esa misa, cuando
cambiaron al cura y lo sustituyeron por otro totalmente pueblerino, que todavía
trataba de meter temor a Dios diciendo que el diablo tiene cachos y huele a
azufre. Lo corrió y a Luis Loreto no lo ha vuelto a ver. Luis Loreto se graduó
con Luis Felipe y nos dice que en la facultad le decían y lo conocían como
Picasso.
Continuando la conversa entre Javier y AIg, le
responde Javier que está casi seguro que Guillermo Loreto trabajó en el
hospital Naval de la Guaira y que es posible que no coincidieran pues él solo
había estado un año. Javier trabajó en el hospital Militar por 23 años.
Paralelamente, Eduardo Suárez hablando con Gilberto Morales, le recuerda que en
1945 estuvieron juntos en kínder con nuestra maestra, su tía Mercedes, en el
Paraíso a lo cual JP le agrega que él y Jose Rosendo también estuvieron con la
“Tía Mercedes” y tu prima Lolita. No estoy seguro, pero creo haber oído que en
ese grupo también estuvo Roberto Augusto. Estos tienen más de 70 años de
amistad. ¡Qué maravilla!
A mí se me ocurrió preguntar si alguien sabía de la
vida de los Loretos y la realidad es que, por lo visto, el único que más nunca
los volvió a ver fui yo. Se aparece otra vez Troconis para comentarle a Luis
Felipe, me imagino por lo de Picasso, que en una oportunidad que él gerenciaba
un proyecto de viviendas se le contrató a Luis Loreto para que dibujara unas
vistas del conjunto y lo que les presentó fue una obra de arte en acuarela. De
hecho, lo mandaron a montar para tenerlo en la recepción de la oficina. A JP,
le consta que, los Loreto son gente de mucho talento.
Al principio de la conversa sobre los Seniors, JP
había dicho que sí yo tenía las fotos del Edasi de las promociones de Ciencias
y Humanidades se las pasara para ayudarlos a identificar los posibles Seniors
en ambas. Afortunadamente las encontré y JP les comenta recientemente a AIg y a
RK, que gracias a ellas le había sido sencillo determinar los Seniors de la
promoción SIg’61.
AE se refiere al comentario de Jose Antonio Troconis Berti.
sobre la maravilla, facilidad y belleza del dibujar con plumilla de Luis Loreto
(Arquitecto) y que, en verdad, tan es así que en la Facultad de Arquitectura lo
llamaban Da Vinci, pero se confundió pues, según LF, lo llamaban Picasso.
Continúa AE que los Loreto todos tienen que ser buenos por la estirpe que
tienen y como señaló JPBQ, el Dr. Luis Loreto fue el padre del Derecho Procesal
Moderno, heredero de la sapiencia del Dr. Arminio Borjas, el Comentarista del
Código del Derecho Procesal (abuelo de dos grandes abogados y Doctores en
Derecho; el Dr. Arminio Borjas H. Eximio Profesor de Derecho Procesal y del Dr.
y Académico Leopoldo Borjas H. ambos fallecidos).
AE se queja de que nadie le ha ayudado a recordar los
nombres de los Maestrillos responsables de nuestro cuidado en tercero de
bachillerato y cuarto y quinto de humanidades. Pregunta ¿Como se llamaba el
Profesor de Historia de Venezuela en tercer año porque en cuarto y quinto creo
que fue el Dr. Julián Fuente Figueroa que tenía sus obras de historia?
José Pedro le contesta a AE: Armani nuestros
maestrillos fueron el Padre Julio Velilla en primer y tercer año. Vive todavía,
está en la UCAB sobreviviente de cáncer del riñón. Suelo verlo y me he
confesado con él. En segundo año el Padre Ignacio Huarte, fallecido que llegó a
provincial. En cuarto y quinto fue el Padre Acosta no recuerda su nombre y le
perdió la pista. JP tiene los riñones de quejarse…! ¡Que vaina con la memoria!
AE le dio las gracias y se recordaba del Padre Acosta. Y, a una duda anterior
de AIg, le aclaró a AIg que en tercer grado en Jesuitas era el Hermano Diaz del
Cerio SJ quien tenía como tres o cuatro libros de Historia de Venezuela para
los primeros grados y vivió muchos años en el colegio. Guarda buen recuerdo de
él.
Al final JP considera que los seniors van a ser los
quince o catorce que decía Roberto K y que estima que Armando Enrique debe
estar. Todavía recuerda el EDASI de octubre de 1950 donde aparece en la portada
una foto tomada por el Hno. Igoa de los tres hermanos Cubillan en lo que se
llamaba "el terreno de Chacao", luego sede del CSI de Chacao...estaba
Armando en 1er Grado, Jorge (qepd) en 2do grado y Rafael en 4to grado y le pide
a AE que nos la envíe pues los Cubillan tienen ese EDASI y otros de la época;
los llevaba Rafael a los Aquelarre en la caballeriza del CCC. Enseguida puso AE
la foto en el chat. Un rato después, en
esta mezcla continua de conversaciones paralelas que nunca terminan, Angel
Ignacio, creo que le responde a AE, que estuvo en la Armada y se retiró como
Capitán de Corbeta, equivalente a Mayor en las otras fuerzas.
A los pocos minutos nos informa Raul Aldrey que el
domingo pasado se había encontrado con Gustavo Reyna, quien le dijo “Ya estoy
curado” y que tenía muy buen aspecto, con entusiasmo, conversador y cuidándose
según corresponde. Enseguida todo el chat se vertió a felicitar a Gustavo por
su recuperación y en cuestión de segundos, Raúl nos reenvió la respuesta de
Gustavo Reyna:
“Muchas gracias a todos por estar pendientes. Pasé una
época dura pero provechosa. Seguí un tratamiento de seis ciclos, cada uno de
veintiún días, cinco hospitalizado durante los cuales me daban quimioterapia 96
horas. Al terminar, tenía 16 días de descanso y vuelta a empezar, hasta que mi
médico Carlos de Jongh me informó a principios de mayo que estaba curado, en
remisión completa. Luego recibí 20 sesiones de radioterapia de consolidación
que terminaron el viernes pasado, y ya de nuevo incorporado a mis actividades
ordinarias. Gracias a todos por sus estimulantes comentarios. La ayuda de los
amigos de toda la vida y la gracia de Dios, con la Intercesión de la Virgen del
Colegio y de San Ignacio, así como de mi familia han hecho la diferencia.
Muchas gracias a Raúl por informarlos con fuerte abrazo para todos”.
Esa es la maravilla de la tecnología, ustedes se
imaginan esta diáspora familiar y de amigos que todos estamos viviendo, pero
sin el IoT (Internet of Things) que nos permite enterarnos en segundos y
minutos de lo que sucede en el mundo y a la familia y los amigos. Ojalá
recuperemos pronto a nuestro país y podamos iniciar su recuperación y
modernización. Como buenos ignacianos velemos porque eso sea una realidad.
Les transcribo los que, a la fecha, están
identificados como Seniors y como Fundadores de VL:
Fundadores de VL
(19): Agustin Coll, Andrés Duarte Vivas, Carlos Gámez Arevalo, Freddy Lazo, Gilberto
Morales Briceño, Gustavo González Urdaneta, Gustavo Roosen, Gustavo Reyna, Hans
Vogel (qepd), Javier Jaso, José Antonio Troconis Berti, Jose Ignacio Oteyza, José
Pedro Barnola, Lorenzo Fernández, Luis Fernando Oteyza (qepd), Oscar García
Mendoza, Oscar García Senis, Rodolfo Bartha (qepd) y Víctor Márquez Muskus.
Tal vez muchos de ustedes que tuvieron la paciencia de
leer hasta esta página están cansados, pues les cuento, que yo también de
escribir, pero tengamos la misma persistencia en contribuir a sacar al
Usurpador, lograr un gobierno de transición y llegar a unas elecciones libres.
Después de esta pausa de amistad y solidaridad, me despido de todos
agradeciéndoles el interés que siempre han tenido en participar en el chat y
mantenernos en comunicación. ¡De eso se trata!
Tanto Pablo Hernandez Mantellini , como yo mismo , entramos en segundo grado en Jesuitas ( veníamos del colegio de Monjas con la capilla más bella de Caracas y que fue parcialmente " amputada " para el paso de la Av. Baralt ) y en tercer grado quedamos en Jesuitas con el Hno. Diaz de Cerio , autor de los libros " Nociones Elementales y Ejercicios Prácticos para niños de Primer Grado ( y tambien para los de Segundo y creo que de Tercero ) . Llegamos a Chacao para el cuarto grado , con Tobias.
ReplyDeleteUn gran abrazo desde la isla de Margarita ; casi " Ñero " luego de 26 años por estos lares .
P.D. Y ya bisabuelo ... !!
Comentarios Chat Sig’61
ReplyDelete¡Gustavo, 20 puntos! ¡Que de recuerdos!
Eduardo Rivero
Maravilla Gustavo, he disfrutado y vivido tu excelente crónica. Te felicito y como dice Alvaro te nombramos Cronista número uno del Colegio San Ignacio. Recibe un gran abrazo.
Angel Ignacio Osorio
Querido Gustavo: después de leer con mucha acuciosidad tu extraordinario recuento, llegué a la siguiente conclusión: que no sólo eres el cronista del grupo SIG61, sino de todo el Colegio, y a la vez nombrar un Consejo Consultivo, formado por JP, AE, AO y dos o tres más.
Recibe un fraternal abrazo y que Dios te bendiga en unión de tu bella familia
Alvaro Rotondaro
Es otra de tus excelentes cartas de presentación. Es noble, afectuosa, honesta, solidaria, motivadora y un muy valioso regalo que nos haces como el amigo consecuente de siempre. Gracias Tobito, mil gracias!! 👍🌿
Raul Curiel Carias
Comentarios en el Chat SIg’61
ReplyDeleteFelicitaciones y gracias a todos, particularmente al Editor y a los que suministraron tanta información extraordinaria. Dicen que recordar es vivir y es verdad ,pero también a esta edad de tres cuartos de siglo para vivir hay que recordando gracias a Dios por tantos y tantos beneficios recibidos.
Juan Garrido Rovira